ENTREVISTA APÓCRIFA A
UN SEPARATISTA (fragmentos)
(…) Mire usted, eso es simplificar las cosas; el nuestro no es solo un afán de destrucción de
España; hay también un segundo nivel y ya estamos en ello: construir de las
ruinas y bajo la égida catalana un nuevo país anexionando Valencia, Baleares y luego, Aragón. De hecho en las dos
primeras ya hemos empezado con ayuda de la izquierda (nos está apoyando en
nuestra campaña, todo hay que decirlo) a imponer el catalán. Estamos ya en el
buen camino. Pronto habremos sembrado en estas comunidades una identidad
catalana y antiespañola, como en Cataluña. (…) Claro, claro; nos felicitamos
por ello: hemos logrado con el dinero de toda España fragmentar la sociedad,
hacer afluir el odio entre amigos, vecinos y familiares. Es una labor paciente,
como podrá imaginar. Han sido muchos años (…) desde luego, con la aquiescencia de los gobiernos centrales.
(…) Por supuesto, ha sido fundamental adoctrinar
en las escuelas y universidades. Luego es fácil recoger el fruto. (…) Sí, con
el dinero de todo el país hemos abierto embajadas catalanas en todo el mundo. (…)
También hemos comprando voluntades (hemos
gastado mucho en ello, la verdad): políticos, funcionarios y periodistas
extranjeros, que nos están ayudando a destruir la imagen de España en Europa. Una
campaña extraordinaria, que está calando: imagínese que estamos comparando a
España con Afganistán y se lo están creyendo. Claro que aquí, los mismos
españoles no defienden su país ni su cultura ni su historia y eso es también de
gran ayuda. Hombre, un poco de violencia por su parte nos vendría bien, claro,
para reforzar la trola del “estado opresor” y todo eso, pero, bueno (…). No podemos quejarnos: hemos logrado que todo
el que defienda la unión del país sea tachado de fascista, no le digo más. Un triunfo
extraordinario. No nos replica para nada la izquierda, que come de nuestra
mano. En fin, en poco tiempo habremos destrozado este país, y habremos hundido
la economía. Luego, ya con los países catalanes que estamos cimentando, ya
veremos cómo lo arreglamos. Hemos adoctrinado a la población de tal manera que aunque
tengan que vivir en la miseria se darán por contentos. Se han tragado totalmente
el cuento. Y nosotros, los artífices, nos cubriremos de gloria y de dinero y de
poder, que es de lo que se trata. (…) Sí, es posible que se estén cometiendo
muchas injusticias, qué quiere que le diga, son inevitables estas cosas: daños
colaterales. No podemos andarnos con ética ni con legalidad ni con decencia si queremos culminar el
proceso (…) ciertamente se nos pueda tachar de
cínicos y de manipuladores, claro, sí. Hemos cimentado nuestro proceso en
maestros como Joseph Goebbels y, en otro sentido, en Maquiavelo, en lo de que
una vez alcanzado el poder, todo estará justificado.
Isabel Martín Salinas
Habas contadas (Crónica urgente de España).
